29/10/10

TOC en peliculas

SINTOMAS DEPRESIVOS

Tratornos depresivos menores. Graciela Lijtin

Las llamadas "depresiones menores" incluyen una enorme heterogeneidad de cuadros, como su intensidad sintomática es leve, poca estabilidad, intermitentes, resistentes a tratamientos farmacológicos y terapeúticos, de larga evolución, tienden a cronificarse con toda la secuela de complicaciones concomitantes psicofísicas y sociales, y con un fuerte impacto en la calidad de vida global de quien lo padece. Por lo tanto lo de "menor"conlleva a equívocos resultantes de una simplificación excesiva.
Su presentación clínica se caracteriza por, constantes oscilaciones de estado de ánimo con alta vulnerabilidad a estresores psicosociales, y tienden a perpetuar patrones vinculares disfuncionales que generan a modo de circulo vicioso, situaciones desventajosas. Otros síntomas son irritabilidad, astenia (sensación generalizada de cansancio),ansiedad y dificultades atencionales.
La "queja principal" es el cansancio físico con malestar y quejas somáticas vagas e inespecíficas, algias diversas, alteraciones del sueño y del apetito.
El "malestar subjetivo" se expresa en la caída del rendimiento personal y el esfuerzo que les representa mantener las actividades habituales. Altos niveles de insatisfacción, sentimientos de desesperanza, baja autoestima, "vivencia de agotamiento"
La conducta de enfermedad que adoptan ante la persistencia del malestar es el sobreuso del sistema de salud, asumiendo la caracterización de "paciente difícil" por parte del médico, quien tiende a la sobreexploración y medicalización excesiva ante exámenes negativos y la insistencia.



ÚSELO Y TÍRELO. El mundo visto desde una ecología latinoamericana. Eduardo Galeano


"Presos de la necesidad o del miedo"
La ciudad como cárcel
(Fragmentos)
La sociedad de consumo, que consume gente, obliga a la gente a consumir, mientras la televisión imparte cursos de violencia a letrados y analfabetos. Los que nada tienen pueden vivir muy lejos de los que tienen todo, pero cada día los espían por la pantalla chica. La televisión exhibe el obsceno derroche de la fiesta del consumo y a la vez enseña el arte de abrirse paso a los tiros.
La realidad imita a la tele, la violencia callejera es la continuación de la televisión por otros medios. Los niños de la calle practican la iniciativa privada del delito, que es el único campo donde pueden desarrollarla. Sus derechos humanos se reducen a robar y a morir.
La vida acaba temprano, consumida por el pegamento y otras drogas buenas para engañar el hambre, el frío y la soledad o acaba la vida cuando alguna bala la corta en seco.
Caminar por la calles de las grandes ciudades latinoamericanas se esta convirtienido en una actividad de alto riesgo. Quedarse en casa también. La ciudad como cárcel: quien no esta preso de la necesidad, está preso del miedo. Quien tiene algo por poco que sea, vive bajo ésta amenaza, condenado al pánico del próximo asalto. Quien tiene mucho, vive encerrado en las fortalezas de la seguridad.
El Estado que ya no es paternalista sino policial, no practica la caridad.
En la época de la economía de mercado, las crías humanas sobrantes se eliminan por hambre o tiro. Los niños de la calle, hijos de la mano de obra marginal, no son ni pueden ser utiles a la sociedad. La educación pertenece a quienes pueden pagarla; la represión se ejerce contra quienes no pueden comprarla.
La injusticia social y el desprecio por la vida crecen con el crecimiento de la economía.
En paises donde no hay pena de muerte, se aplica cotidianamente la pena de muerte en defensa del derecho de propiedad.
En la civilizacion del capitalismo salvaje, el derecho a la propiedad es mas importante que el derecho a la vida. La gente vale menos que las cosas. Resulta revelador el caso de las leyes de impunidad, las que absolvieron al terrorismo de Estado ejercido por las dictaduras militares perdonaron el crimen y la tortura (Chile, Uruguay y Argentina), pero no perdonaron los delitos contra la propiedad.

Noviazgo sin violencia

Esta propuesta surge como una forma de prevención de la violencia de género al considerarse que en la adolescencia se ensayan nuevas formas de comportamiento que marcan el desempeño posterior en la vida adulta.

Objetivos

  • Brindar atención a las adolescentes víctimas de noviazgos violentos.
  • Prevenir noviazgos violentos.
  • Sensibilizar a varones y mujeres adolescentes frente a la problemática.
  • Desnaturalizar vínculos de sometimiento-control basados en la asimetría de la relación de género.
  • Generar relaciones sociales equitativas entre los y las adolescentes.

Destinatarios

Adolescentes de entre 15 y 19 años, afectados por esta problemática y que deseen participar en la propuesta.

Modalidad de trabajo

Se implementan diversos dispositivos que apuntan tanto a la atención de casos como a la prevención y promoción de una vida libre de violencia, entre los que se mencionan:
Dispositivos grupales con fines terapéuticos para adolescentes, a cargo de profesionales (con entrevistas previas).
Talleres para familiares de las adolescentes víctimas de noviazgos violentos y temáticos mixtos (teatro foro).
Espacios de capacitación y sensibilización en la temática.
Campañas de difusión: elaboración y distribución de materiales informativos (folletería, informes epidemiológicos, videos, entre otros).
Registro estadístico de la problemática y elaboración de un diagnóstico cuanti-cualitativo para orientar el diseño de futuras intervenciones destinadas a prevenir noviazgos violentos y erradicar la violencia de género.
 
Teléfono verde
Línea gratuita:
0800 444 0420
Teléfono:
4802446
Horario:
Lunes a domingos de 7 a 24 hs.

A DISFRUTAR DEL FINDE...UN MERECIDO DESCANSO!

MÚLTIPLES CULTURAS, UNA SOLA HUMANIDAD. Zygmunt Bauman


Conocido por sus investigaciones acerca de la naturaleza de la modernidad, su obra comenzó ocupándose de temas como la estratificación social y el movimiento laboral para luego enfocarse en los problemas de la globalización, la exclusión y la pobreza.
Comparto con Uds, a modo de apuntes, párrafos de éste libro como un modo de invitarlos a navegar en su lectura, para reflexionar sobre los tiempos que nos tocan vivir.
...El gran antropólogo noruego Frederik Barth señalaba que las fronteras no se trazan para separar diferencias, sino justamente para lo contrario. Es el hecho de haber trazado la frontera lo que nos lleva a buscar activamente diferencias y a tomar viva conciencia de la presencia de éstas...
...No hay dos seres humanos idénticos en todo el planeta.Pero, generalmente, la mayoría de estas diferencias no nos importan. No nos impiden interactuar. Las pasamos por alto o las desdeñamos por poco relevantes. Sólo hay algunas  que, en determinadas ocasiones y de forma repentina, llaman nuestra atención, nos molestan y nos producen cierta ansia por hacer algo al respecto, por convertir lo distinto en similar, por distanciarnos de aquellas diferencias, por eliminarlas a ellas o a las personas que las encarnan...
...¿que clase de diferencias están adquiriendo importancia debido a las fronteras que tendemos a trazar y a proteger en la actualidad?, ¿que tipo de fronteras son las que hoy nos obsesionan?
Nuestra actual obcecación con las fronteras es el resultado de una vana esperanza: la de poder garantizarnos una protección autentica frente a riesgos y peligros de toda índole, la de poder aislarnos de amenazas vagamente definidas o sin nombre, de las que el mundo en el que vivimos parece hallarse saturado...proviende de la desesperanza de nuestra esperanza o de nuestros intentos desesperados por dar con soluciones locales para problemas producidos globalmente...
...cuando hablo de inseguridad pienso en un fenómeno mas amplio que queda mejor definido por un término alemán...al traducirlo son tres conceptos: incertidumbre, inseguridad y ausencia de protección. La palabra "precariedad" también recoge y plasma la complejidad de nuestros miedos...
...También las relaciones humanas son ahora frágiles, transitorias, fáciles de romper. Solo están vigentes "hasta nuevo aviso"; ya no rige "hasta que la muerte nos separe". Duran lo que dura la satisfacción que brindan a las personas relacionadas...de allí que relacionarse con otras personas se convierte en una experiencia ambivalente y traumática. En éste mundo nuestro líquido e impredecible, necesitamos urgentemente amigos dedicados, compromisos firmes...vínculos fiables con otras personas...pero también por esa misma liquidez siempre podemos temer que si asumimos un compromiso demasiado firme, si nos atamos a otra persona de manera incondicional y permanente, nuestros lazos acaben siendo no un valor, sino una carga: cuando surjan nuevas oportunidades, no seremos capaces de aprovecharlas...
...ya que el mundo exterior es inseguro y no podemos desactivar los peligros que de él emanan, encerrémonos a cal y canto y vallémonos frente a sus efectos patológicos. Rodeémonos de cámaras de seguridad, de agentes de inmigración en las fronteras y de perros especialmente adiestrados que conviertan en sospechosa a toda persona que se desplace de un lugar a otro y sometan a todos los pasajeros a controles y comprobaciones destinados originariamente a los delincuentes y terroristas...
...nada de eso evitará que las empresas y empleos desaparezcan, que nuestros ahorros para la vejez se disipen de un día para el otro, ni detendrá el proceso por el que las habilidades que tienen demanda un día dejan de tenerla...
Según Sartre en cuanto uno tiene un proyecto de vida sabe exactamente que hacer...uno cuenta así con una vía prediseñada, fija, consistente, que le conduce a esa imagen ideal que quiere convertir en realidad...
...¿quien planifica ahora para el resto de su vida? Botanski y Chiapello, dos sociologos franceses escribieron el libro "El nuevo espíritu del capitalismo", para ellos el mundo contemporaneo es visto como un colectivo integrado por seres humanos que se mantiene unido gracias a una red de proyectos...cada uno de ellos es a corto plazo, ninguno garantiza el éxito de por vida, "valemos lo que vale nuestro último proyecto" y el recuerdo de el último no dura mucho. Los logros no se acumulan... La vida está corta en una serie de episodios incongruentes apenas conectados entre si...
...Freud en El malestar en la cultura atribuyó la infelicidad de las personas civilizadas de su época a que sacrificaban demasiado su libertad de elección individual en aras de una mayor seguridad. Si escribiera ese libro hoy probablemente insistiría en el conflicto entre libertad y seguridad pero invertiría las causas de la infelicidad, diría que se debe a que han cedido demasiada seguridad a cambio de obtener una cantidad cada vez mayor de libertad...
...hay una tendencia a dividir la ciudad en un conjunto de guetos voluntarios o involuntarios, por una parte estan los vecindarios de acceso restringido...tambien están aquellos barrios donde se les aplica la expresión "zonas peligrosas" cuyo significado es diferente para quienes viven dentro o fuera de ellas...para los primeros significa no puedo salir...para los segundos mejor no entro alli, me mantendré alejado...
...Richard Sennett al estudiar la experiencia estadounidense señala que la tendencia a "purificar" el entorno inmediato a restringirlo a personas que sean "como nosotros", moverse entre personas "similares", es una forma de evitar fijarnos más a fondo los unos en los otros...rehuir el desafío de la diferencia... 

25/10/10

SAN MARTIN

Político y militar, libertador de Sudamérica y Padre de la Patria en Argentina.
Muere en Francia solo junto a su hija y nieta, olvidado, sin honores y de manera austera.
Su pensamiento es un gran valor, lástima que solo se conozca más de él su labor militar.
Un ejemplo de vida.
Comparto algunas de sus frases…
Mi mejor amigo es el que enmienda mis errores o reprueba mis desaciertos.
Mi sable nunca saldrá de la vaina por opiniones políticas.
Declaro no deber ni haber debido, jamás, nada a nadie.
Cuando la patria esta en peligro, todo esta permitido, excepto, no defenderla.
La seguridad de los pueblos a mi mando, es el más sagrado de los deberes.
Hace más ruido un sólo hombre gritando que cien mil que están callados.
Mi nombre es lo bastante célebre para que yo lo manche con una infracción a mis promesas.

Sacrificaría mi existencia, antes de echar una mancha sobre mi vida pública que se pudiera interpretar por ambición

LA PERSISTENCIA DE LA MEMORIA. Salvador Dalí

SIDDHARTHA. Hermann Hesse

Quiero que al morir, aunque no muera, mis viejas cenizas apagadas se envuelvan con la luz de la mañana.
Nacer cada verano en una flor distinta cubierto por el manto de la vida.
Quiero vestirme con colores irreales de un jardín amigo, de una frustrada primavera.
Confundirme con el viento hasta la playa y rodar en mil piruetas con las olas.
Sentirme parte de la brisa mañanera que moja el musgo de las tumbas y sentir alegría de repente por no estar allí encerrado.
Ser parte de ésta tierra santa y volver a vivir estando muerto.
Ser luz, aire, agua, ser todo lo que pueda y no ser nada.
Vivir con las tormentas del invierno y ver llegar los pájaros hasta este puerto.
Firme en la montaña, sujeto de algún árbol, ver la tierra allá abajo y sentirme un poco dueño.
Déjenme morir como yo quiera. Déjenme vivir un poco más mientras esté muerto y nacer en cada flor de primavera.

24/10/10

Sonrian! Feliz semana

Un poco de un humor para empezar la semana

Gimnasia cerebral….a mover los hemisferios!!!

Si nos detenemos a recordar en que momento de nuestras vidas y frente a algún conflicto, se nos ocurrió la solución tan buscada!, la mayoría podrá decir en el momento menos pensado.
Dicen los entendidos que la mayor parte del tiempo y el hemisferio que mas utilizamos es el izquierdo, pero que la creatividad y la resolución de problemas se desarrolla en el hemisferio derecho.
La gimnasia cerebral, desarrollada por Dr. Paul Dennison en los años setenta, consiste en movimientos y ejercicios que estimulan el funcionamiento de ambos hemisferios cerebrales.
Partiendo del principio básico de que cuerpo y mente son un todo inseparable y de que no hay aprendizaje sin movimiento el Dr. Paul Dennison ha creado una serie de movimientos coordinados cuyo objeto es activar los sentidos y facilitar la integración y asimilación de nuevos conocimientos.
Un ejemplo de uno de los ejercicios típicos de la gimnasia cerebral es el movimiento cruzado:
Sentado en una silla, levanta la rodilla derecha y tócala con la mano izquierda.
Levanta la rodilla izquierda y tócala con la mano derecha.
Repite los dos movimientos lentamente diez veces.
La gimnasia cerebral o ejercicios mentales son actividades que estimulan alguno de los hemisferios cerebrales (incluso ambos) dependiendo la naturaleza de los mismos. La gimnasia mental sirve para activar y potenciar el funcionamiento de nuestro cerebro, principalmente de aquellas actividades que pocas veces la utilizamos de forma cotidiana.
Nuestro cerebro está divido por dos hemisferios el izquierdo y el derecho, el primero está comprobado que cumple funciones de orden lógico, operaciones matemáticas, control del lenguaje hablado y escrito, razonamiento; el hemisferio derecho se relacionan con las emociones, habilidades artísticas, imaginación, ritmo, sentido musical.

Algunos de los ejercicios que son muy recomendados además para prevenir el Alzheimer:

- Use el reloj en el pulso contrario al que normalmente lo usa;
- Cepíllese los dientes con la mano contraria al de costumbre:
- Camine por la casa, de espalda (en la China, esta rutina lo practican en los parques);
- Vístase con los ojos cerrados;
- Estimule el paladar con cosas diferentes;
- Vea las fotos, de cabeza para abajo (o las fotos, o usted);
- Mire la hora, en el espejo;
- Cambie de camino para ir y volver del trabajo;
- Muchos otros, dependiendo de su inventiva.

LA EDUCACION Y EL MALESTAR DOCENTE. Maestros descuartizados

Por Claudio Jonas *
Túpac Amaru terminó sus días con la lengua cortada y descuartizado por cuatro caballos. Fueron los civilizadores españoles de turno los que consideraron que este procedimiento didáctico dejaría una enseñanza amplia y duradera para cualquier otro peruano que soñara con rebelarse. Los docentes pasan sus días luchando para no ser descuartizados por las exigencias que los tironean desde distintos ámbitos; convencidos de que soportar esta pesadilla forma parte de las condiciones que se requieren para poder enseñar.
El cacique peruano luchó por la dignidad avasallada, y perdió: murió descuartizado. El docente tolera que se avasalle su dignidad, y pierde: vive descuartizado. Pero, ¿cuáles son y en dónde se anudan las metafóricas cuerdas que tironean al docente de esta nefasta analogía? La primera, la más evidente, la que comparte con infinidad de contemporáneos, la que Túpac Amaru no padeció, es la que condena a vivir a la mayor parte de los docentes “con la soga al cuello”. ¿Quién supone que se puede transcurrir alegremente por las aulas con un problema de esta índole sin resolver? Dicho de otra manera: si los requerimientos mínimos de una persona suman una cantidad y su retribución económica no alcanza a la mitad de ese valor, ¿en qué curso de capacitación se resuelve este cálculo? Sin embargo, los estoicos docentes han resistido a lo largo de la historia esta crónica restricción de oxígeno. Aun así, el mágico recurso de hacer del innecesario sacrifico una loable vocación no es suficiente para moverse con libertad.
Como veremos a continuación, todavía podríamos imaginarnos a cada uno de sus miembros inmovilizados y traccionados con sendas ataduras. Uno de sus tobillos lleva, como lastre de considerable magnitud, su historia personal como alumno y la de su formación, en la que salvo contadísimas excepciones, la consigna de “la letra con sangre entra” quedó grabada a fuego. Que en su implementación se hubiera perdido el placer por la letra no parece empañar la obsesiva fidelidad con que se renueva este recurso. Tan fuerte es esta amarra que prácticamente no existe quien no recurra a ella, a pesar de haberse demostrado y declamado su inutilidad.
Y, como es lógico, nadie extrañará tampoco los nuevos proyectos pedagógicos, que se implementan con este mismo lastre, caigan en la cuenta que estaban condenados al fracaso desde el vamos. Traccionando desde la otra pierna: la burocracia institucional. Un renovado, incoherente y paralizante cúmulo de exigencias y reproches, curriculares y normativos, recorren en forma descendente la pirámide del poder educacional, con un único resultado: abrumar o automatizar al docente.
A este conjunto no le falta la desopilante consigna, que reza en tono admonitorio: “Sea creativo”.
“Por lo menos nos quedan los brazos libres”, se alegró irónicamente una docente que seguía con atención esta descripción del suplicio cotidiano. Pero no; por consideración a la verdad, fue imposible no pincharle ese globo de imaginaria independencia. Uno de sus brazos soporta la multiplicidad de requerimientos de cada alumno con su respectiva familia, que en un amplio espectro va desde lo normal hasta lo francamente patológico y le exige alguna respuesta, imposible de satisfacer. El peso que esta demanda significa para muchos docentes favorece una reacción defensiva de indiferencia y “concentración en la tarea”, que –cae por su propio peso– contradice cualquier proyecto pedagógico que se sustente en el vínculo docente-alumno.
Y para terminar –con la analogía, no con las ataduras, porque éstas superan la imaginación más florida–, el mundo extraescolar, caótico, contradictorio, violento, hegemonizado por valores mercantilistas e impregnado por un desprecio, cada vez más extendido, por la vida humana.
Aldea global –dicen– en la cual las recomendaciones de capacitar a las futuras generaciones para el mundo actual –si se tomaran al pie de la letra– llevarían a cerrar las escuelas, para dejar la tarea de adaptación a los tiempos que corren a las empresas que subsistan a la canibalesca competencia, al narcotráfico o a los fabricantes de armas.
Es obvio que, en estas condiciones, no es posible pensar en grandes reformas, si no se tienen en cuenta –en primera instancia– las condiciones en las que se hallan sus principales protagonistas. Es imprescindible comenzar por aflojar –aunque más no sea eso, hasta llegar a desatar– cada uno de los lazos que inmovilizan el pleno desarrollo de los docentes.
¿Cómo alguien puede llegar a ser convincente en su arenga sobre las conveniencias de capacitarse para “forjarse un futuro digno”, si al mismo tiempo está pensando cómo llegar a fin de mes?
¿Cómo va a promover la participación, la creatividad y la crítica como instrumentos válidos, si no tuvo ni tiene espacios en los cuales haya podido ejercerlos de manera real y concreta?
¿Cómo llegar a consustanciarse con la idea de prestarle atención a cada alumno para rescatar lo diferente y positivo de cada uno, si sus propias diferencias no son respetadas?
¿Cómo prepararse para vivir de manera actualizada sin poner en tela de juicio conocimientos y valores obsoletos?
Dicen que la caridad bien entendida empieza por casa.
Empecemos a desanudar, sin prisa y sin pausa, de manera sostenida y convocante, con metas profundas y posibles, a recuperar la potencialidad docente y contribuir verdaderamente a un mundo que merece ser conservado, pero, por sobre todo, transformado.
¿O también peligran nuestras lenguas?
* Psicoanalista. Autor del libro Hay límites que matan.


¿Qué es la violencia familiar?

Es una realidad que afecta y daña a muchas familias, fuertemente condicionada por patrones socioculturales que la generan y permiten.

La sufren mayoritariamente las mujeres y los niños, como consecuencia de los desequilibrios de poder dentro de una familia.
Se da en un proceso, no surge “de golpe”, por eso es esencial detectarla a tiempo. Es una grave violación a los derechos humanos.

Maltrato psicológico
·                                 Control, insultos, humillaciones, desvalorización.
·                                 Persecuciones, vigilancia, acoso, amenazas.
·                                 Celos excesivos.
·                                 Cuando el compañero cuenta sus aventuras amorosas.
·                                 Amenazas con alejar a los niños de su madre o acuso de no saber cuidarlos.
·                                 Críticas al cuerpo, manera de hablar o de vestir.
·                                 Impedimento a que la mujer estudie, trabaje o reciba visitas.
·                                 Rechazo del afecto con indiferencia.
·                                 Uso del silencio como castigo.
·                                 Si el compañero aleja a la mujer de su familia o amigos.

Maltrato físico
·                                 Empujones, escupidas o patadas, bofetadas, golpes de puño.
·                                 Agresión con objetos: arrojar platos, cuchillos u otros elementos cortantes.
·                                 Cortes, quemaduras, lesiones, apretones del cuello, agresión con armas.
·                                 Encierro.
·                                 Obligación de realizar tareas que comprometen la salud.

Maltrato sexual
·                                 Obligación a tener relaciones sexuales sin deseo.
·                                 Imposición de actividades sexuales que resultan dolorosas o desagradables.
·                                 Si se impide la prevención de embarazos.
·                                 Si no se toman precauciones frente a infecciones o enfermedades de transmisión sexual.
·                                 Uso de la fuerza física: violación.

Maltrato económico
·                                 Control de los gastos de manera obsesiva.
·                                 Impedimento a tomar o participar en decisiones económicas.
·                                 Exigencia de dinero u obligación a conseguirlo.
·                                 Negación de la cuota alimentaria o entrega de una cuota insuficiente.
·                                 Prohibición a manejar dinero propio.

¿Qué hacer frente a una situación de violencia?
·                                 La víctima no debe quedarse sola.
·                                 Salir a la calle, pedir ayuda.
·                                 Asesorarse en el Teléfono Verde: Lunes a Viernes de 8 a 19 hs. Línea Gratuita: 0800 444 0420 / Tel.: (0341) 480 2446.
·                                 Buscar a alguien de confianza.
Irse de la casa por maltrato NO es "abandono de hogar" ni implica peligro que los hijos sean separados de su madre.

Si se decide hacer la denuncia
·                                 En la seccional más cercana, dejar constancia del abandono del domicilio por malos tratos. Si hubo violencia física, pedir orden para un médico policial.
·                                 Puede dirigirse a Tribunales de Rosario: Balcarce 1650, Tel. 4721700.
·                                 Puede pedir una Defensoría de turno y hacer una "Denuncia por Violencia Familiar" bajo la aplicación de la Ley provincial de Violencia Familiar Nº 11.529. Si hubo golpes, solicitar atención médica.
·                                 Si no hay Defensorías de turno, se puede hacer la denuncia en la Fiscalía de Turno y pedir la aplicación de la Ley provincial de Violencia Familiar Nº 11.529.
·                                 En casos de violación o abusos sexuales, puede dirigirse al Centro de Orientación a la Víctima de Delitos Sexuales: Italia 2153 PA, Comisaría 5º, Tel. 4728523.

Otras recomendaciones
Tener siempre a disposición y en lugar seguro:
·                                 Documentación propia y de los hijos.
·                                 Medicación básica.
·                                 Llaves de la casa.
·                                 Una muda de ropa.
·                                 Agenda con números telefónicos.
·                                 Tarjetas de transporte y de teléfono.

23/10/10

Atención Psicológica

Lic. Silvina Díaz
Psicóloga
Mat. 5225

Niños y adolescentes
Adultos mayores
Pericias psicológicas
Arancel diferencial para estudiantes
Te. 155-488420
447-2124

Los límites en la primera infancia: cuándo, cómo y por qué

Acentuar los logros, enseñarle al niño a cuidarse y reforzar la comunicación son clave para que los chicos crezcan con confianza en sí mismos, opinan los especialistas

Martes 30 de junio de 2009




Por Mariángeles López Salon
De la Redacción de lanacion.com
mlsalon@lanacion.com.ar
Los enchufes son toda una tentación. Tomás, de dos años, está pendiente de cualquier descuido de sus padres para explorarlos. Y cuántos más retos recibe, más la atracción. "La prohibición despierta el deseo -dice Eva Rotenberg , creadora de la Escuela para Padres -. Si sólo se acentúa el No, los padres están estimulando que desobedezca. Cuando se enfatiza tanto lo que está prohibido, se lo atrae. Tiene un doble efecto."
En esos casos, lo conveniente es darles a los chicos opciones y ofrecerles un juego compartido. "Lo mejor es festejarle otras cosas porque en la crianza se pueden acentuar los logros o lo que está mal. Si se acentúan los logros, crecen con confianza en sí mismos. Sino, piensan que todo lo que hacen está mal, y eso les genera inseguridad", agrega la especialista.
El concepto de límite, generalmente relacionado con la autoridad, es una forma de enseñarle al niño a cuidarse. "Implica brindar un marco de contención y seguridad al desborde de ciertas conductas que suelen significar también muchas veces expresiones de angustia", explica Felisa Lambersky de Widder , coordinadora del departamento de Niños de la Asociación Psicoanalítica Argentina
Para la escritora Laura Gutman , autora de los libros La revolución de las madres y Crianza, violencias invisibles y adicciones , hablar de límites es un malentendido. "Tenemos un problema de comunicación entre lo que pide el niño -porque lo necesita- y lo que los adultos estamos dispuestos o no a ofrecer. Cuando un niño -que es un ser dependiente- pide y no obtiene, desplaza su pedido hacia otros más ?escuchables?. Por ejemplo, cuando ya se cansó de pedir presencia, pide caramelos. No importa cuántos caramelos coma, seguirá pidiendo más. Los padres creemos entonces que ?no tiene límites?. En verdad, no hemos escuchado el pedido original, que se puede satisfacer."
La clave está en acompañar. "Algún No puede tener sentido, siempre y cuando los adultos tengamos alguna opción de Sí. Por ejemplo, No podes tocar la ficha de la electricidad pero Sí te acompaño a subir y bajar las teclas de la luz, todas las veces que quieras hasta descubrir el secreto (tampoco son tantas veces si acompañamos un rato al niño en su exploración)", ejemplifica Gutman.
Primeros pasos, primeros límites
En la etapa del gateo y de la deambulación comienzan a marcarse las primeras pautas de comportamiento. "Es cuando frente al desconocimiento del niño, éste se ve impulsado a realizar actos que implican un riesgo para su vida como, por ejemplo, tocar los enchufes o intentar saltar de la cuna por sobre los barrotes", explica Widder.
En otros casos, responden a convenciones sociales. "En la etapa del control de esfínteres, si bien esta enseñanza está a cargo de los padres, la necesidad de reconocer el deseo de evacuación y micción en el ámbito correspondiente deviene de un límite impuesto por la cultura, que exige al pequeño la renuncia al placer de ensuciarse propio de la edad y comprende un aprendizaje que los adultos significativos deben acompañar", agrega.
"Si el niño se sabe escuchado y comprendido puede perfectamente acompañar o tolerar cuando algo en particular no se puede obtener. Pero cuando no obtiene nada -desde sus expectativas de cuidados maternales- le resultará mucho más difícil. Es hora de ponernos en el lugar del niño pequeño y tratar de vislumbrar el mundo desde ahí", concluye Gutman.
Es un aprendizaje, y como tal debe impartirse con tranquilidad, seguridad, firmeza, claridad y amor.

¿FRACASO ESCOLAR? Una reflexión sobre los modos de intervención docente. Silvina Díaz

Jean-Claude Filloux[1] en su libro Campo pedagógico y psicoanálisis dice que pareciera que la pedagogía fuese un lugar de demandas. Demandas de ayuda para comprender lo que sucede cuando existen conflictos o fracasos, para elaborar métodos o actitudes de enseñanza adaptadas a las situaciones. Sigmund Freud[2] en el siglo pasado había situado tres imposibles: gobernar, educar y analizar. Como tal el educar puede ser pensado a diferenciar de la impotencia, en tanto solo a partir del imposible se puede delimitar el campo de lo posible.

Espacio de Apoyo escolar
Esta experiencia que me interesa compartir la vivenciamos durante el año 2008 en el marco de una propuesta de Apoyo Escolar, dependiente del Programa Familias para la Inclusión Social del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Éramos dos docentes los que trabajaríamos con un grupo de veinte niños en una escuela de una zona periférica y de muy bajos recursos, en la ciudad de Rosario. Esta Institución intentaba trabajar con una matricula de mas de mil alumnos, lo que implicaba grados superpoblados y con situaciones de las mas variadas tales como ser, abandono familiar, desnutrición, violencia, repitencia, deserción o invitación a abandonar el aula, entre otras.
Estos niños con los que comenzamos a relacionarnos tenían entre 8 y 12 años, había varones y mujeres, y cuando realizamos el primer acercamiento nos encontramos con que muchos no estaban alfabetizados, no tenían demasiado interés en la propuesta pero lo que si tenían claro que la misma era condición para poder seguir asistiendo a la escuela.
Los primeros encuentros se nos tornaron una vívida repetición de las situaciones que se daban con ellos en el aula, respecto del espacio en si y con la misma relación que  mantenían  con sus pares y docentes, se destacaban ante todo, por sus problemas de conducta.
En los primeros intentos de alguna actividad todo conducía al fracaso, solo había en esas dos horas caos, los cuerpos y la agresividad eran los protagonistas de las jornadas.
En las reuniones que nosotros habíamos tenido, previas al inicio de esta propuesta, trabajando sobre la “guía para la actividad de apoyo escolar”, la misma planteaba como objetivo prioritario “paliar y prevenir las situaciones de fracaso escolar”, era claro que el mismo se nos impuso de manera brutal desde un primer momento al salir al campo.
No había dudas de que algo estaba fracasando con estos chicos, pero ¿es el fracaso escolar una enfermedad? ¿Cómo se curaría, si pretendemos un paliativo? ¿Se puede prevenir?
Demasiadas eran las preguntas que teníamos, y bastante la incertidumbre, pero no buscábamos ni culpables, ni responsables, no nos sobraba el tiempo, fue entonces que nos dispusimos a conocerlos, a generar un vinculo con ellos. Las primeras conclusiones de estos espacios fueron que estábamos con niños  en donde el manejo de su cuerpo, la falta de circulación de la palabra y la seudo reproducción del espacio áulico tradicional en nuestras propuestas y actividades, hablaban claramente del “fracaso” de las jornadas.
Fue necesario pensar estrategias, lo corporal y la agresividad eran lo común a todos, pero también había tantas particularidades como niños. Antes de poder elaborarlas, decidimos armar una fundamentación, que nos permitiera oficiar, de guía y sustento de las actividades que pondríamos a consideración. La misma es desarrollada a continuación.

Marco teórico
“El valor de un acto se juzga por su oportunidad”
Lao Tse-filosofo chino –Taoismo 

La escuela como institución social soporta hoy en día más de una demanda, algunas de ellas urgen ser resueltas, pero si pudiéramos descomprimir un poco tal situación, es la demanda que pasa por el aprendizaje la que fundamentalmente apremia en estos niños, quienes tendrían que ser educados para tener las herramientas indispensables al salir a formar parte de nuestra sociedad. En una escuela con las características a la que ellos asisten, tener en consideración lo que se plantea en términos pedagógicos, a saber, las variables de la población escolar, sus tiempos subjetivos, para respetar así el derecho ineludible a su educación, se convierte en una tarea mesiánica.
Al ver nosotros este espacio, como una nueva oportunidad para estos chicos, y además como un modo de replanteo para el abordaje de estas problemáticas, comenzamos por intentar definir  que es “aprender”.
Tomando conceptos de Alicia Fernández[3], el aprender es subjetivo, no puede ser establecido en años, lo que habla entonces de la capacidad de simbolizar y conceptualizar de cada niño, ligada al aquí  y ahora, a su breve historia, a su futuro y a sus modos personales de aprender, todo esto condicionado por aspectos socioculturales, económicos y pedagógicos. Además, sabemos que para poder aprender se necesitan dos sujetos (docente-alumno) y el “vinculo”, aspecto también primordial, que se establece entre ambos.
El ser humano para poder aprender, no solo en el ámbito escolar, debe poner necesariamente en juego, su organismo individual heredado, su cuerpo construido especularmente, su inteligencia auto construida interaccionalmente y el deseo, que es siempre deseo del Otro.
Cuando hablamos de inteligencia, deseo y corporeidad, nos referimos a intercambios afectivos y cognitivos con el medio, aquí se dejan ver no solo los intercambios simbólicos, sino también virtuales y especialmente los vínculos de aprendizaje que suponen la articulación de todos estos niveles.
La estructura cognitiva y la simbólica, llegan a ser diferenciables con el paso del tiempo y están articuladas permanentemente. La inteligencia tiende a objetivar, buscar generalidades, ordenar, etc., mientras que por el contrario el movimiento del deseo, mucho mas profundo que el anhelo, es subjetivante, es decir, tiende a la individuación, a la diferenciación de unos con otros.
El nivel simbólico organiza la vida afectiva y las significaciones de cada uno, el lenguaje, los gestos y los afectos actúan como significantes, marcas, huellas, con ellos cada sujeto puede decir como siente “su mundo” y le permite además ponerse en relación con otros.
Entonces mientras que la inteligencia se propone apropiarse del objeto, conociéndolo, generalizándolo, incluyéndolo en una clasificación, por su lado el deseo se propone apropiarse del objeto, significándolo. Ahora bien, ¿Que lugar ocupa el cuerpo en todo esto?

Cuerpo ¿estas en la escuela?
Si nos remitimos a elaboraciones como las realizadas por Michel Foucault[4], hace historia en la institución escolar el disciplinamiento del cuerpo, valor preciado de los docentes de hace un tiempo atrás, donde el aprender implicaba como condición la quietud, la rectitud, el cuerpo tabú, castigado y silenciado.
Sin embargo hoy en día, es de público conocimiento que el aprender transcurre en el seno de un vínculo humano, cuya matriz se conforma en los primeros vínculos madre-padre-hijo-hermano. Esto permite pensar que el aprendizaje es un proceso, cuya matriz es “vincular, lúdica y tiene su raíz en lo corporal”, su despliegue creativo se pondrá entonces “en juego” a través de la articulación inteligencia-deseo y equilibrio asimilación-acomodación.
Para poder dar cuenta de las “fracturas” en el aprender, debemos atender sobre todo a los “procesos”, cual es su dinámica, su movimiento, su tendencia y no a los resultados o rendimientos. Si nos detenemos a ver en estos niños, como aprenden, como juegan, si juegan y sobre todo, cual es la originalidad de su fracaso a partir del cual se impone su diferencia como sujeto, podremos dilucidar porque no aprende. Frente a este planteo podríamos pensar por ejemplo, que un niño entonces podría no aprender solo como un modo de responder a su marginación socio-educativa.
Frente a lo desarrollado y a la determinación en nuestra observación, de que una de las fracturas en el proceso de aprendizaje de estos niños tiene su anclaje justamente en el cuerpo, tomamos este concepto para poder pensar esta problemática y fundamentarlo.
El modo en que estos niños habitan sus cuerpos, es en un decir “repitiendo”, sobre todo agresividad, ya que un cuerpo de movimientos espontáneos no es permitido para ellos en la escuela. En sus aulas son un cuerpo a educar, pensado por fuera del sujeto, por lo tanto se hace necesario para nosotros que se pueda pensar en el sujeto, y a través de su cuerpo, habilitarlo para que pueda expresar sus angustias, inquietudes, y esa búsqueda de poder diferenciarse, significarse.
Para poder trabajar con ellos y llegar al proceso de aprendizaje, tenemos que pensar en un cuerpo que aprende, un cuerpo en movimiento, con una significación, un sentido diferente, al decir de un “cuerpo en construcción” y sobre todo en relación con los otros y con el medio, como resultado de una historia y de la experiencia del sujeto. Así en el “hacer del cuerpo” se inscribe la posibilidad creativa.
Nos gustaría destacar una frase de la psicomotricista Sandra Migoni que dice que “el cuerpo no se aprende, se aprende de la propia experiencia”.
Creemos entonces que en la posibilidad de poder desplegar sus conflictos, en vez de reprimirlos, se podrán ir elaborando diferentes situaciones a través de la simbolización lúdica, para que de este modo puedan ir organizando sus juegos y el aprendizaje.
Existe una señal inconfundible que expresa de un modo maravilloso, que el placer esta en el cuerpo, y es la expresión de un niño cuando logra una respuesta. La apropiación del conocimiento implica el dominio del objeto, su corporizacion practica en acciones o imágenes,  necesariamente resuenan en el placer corporal.
No hay aprendizaje que no este registrado en el cuerpo, así como no hay imagen hasta que el cuerpo no empiece a inhibir el movimiento. La participación del cuerpo en el proceso de apropiación del conocimiento se da primero por la acción, luego llega la representación para otorgarle su configuración.
A través del cuerpo se realizan las mostraciones de “como hacer” pero esto se da sobre todo porque a través de la mirada del docente, la modulación de su voz y la vehemencia de su gesto se canalizan el interés y la pasión que el conocimiento significa para el. Este placer agregado que tiene que venir del docente, significara ese deseo del otro donde deberá anclar el deseo del sujeto que aprende, esto es una de las partes clave para que el aprendizaje se ponga en marcha.
Entonces podemos empezar a pensar que el espacio educativo debería ser un espacio a construir entre todos y en donde se den fundamentalmente la confianza, la libertad y el juego, como ejes del quehacer cotidiano.


[1] Licenciado en filosofía y pedagogía francés
[2] Medico y neurólogo austriaco, creador del psicoanálisis
[3] Psicopedagoga argentina
[4] Filosofo e historiador francés
A modo de cierre
Si tuviéramos que responder a la pregunta ¿Qué es el fracaso escolar? Podríamos decir que estos niños daban sobradas muestras de el. También podemos pensar donde estaban los docentes de la Institución escolar que permitieron que un niño de casi doce años llegue a esa instancia sin poder leer o dividir sin siquiera preguntarse porque esto sucedió y que se pudo hacer al respecto. Podríamos preguntarnos por los padres y por ese o esos niños.
Ya sobre tantas de estas preguntas ha habido y seguirán surgiendo muchas respuestas, pero lo que en si queremos rescatar de nuestra experiencia es la imperiosa necesidad de pensar en los niños, de tener en cuenta sus saberes, escuchar sus decires y de la capacidad y el espacio preciado que tenemos los docentes para no morir en el intento, valorando nuestros saberes, confiando en ellos sin esperar que sean solo los libros o las recetas de otros las que nos ayuden a enfrentar las particularidades de la tarea docente.
Proponemos no quedarse en la impotencia de estas situaciones, y utilizar aquello que parece imposible para delimitarlo e ir en la búsqueda de lo que nos brinda la oportunidad de poder trabajar desde aquello que si se puede, no todo esta perdido.